Kiev (EFE).- Rusia volvió a atacar anoche con drones la región sureña ucraniana de Odesa, donde aparatos kamikaze no tripulados Shahed de fabricación iraní alcanzaron infraestructuras dedicadas a la producción y el trasbordo de productos destinados a la exportación y provocaron daños en graneros.
“Por desgracia, ha habido impactos en infraestructuras de producción y trasbordo, donde se ha producido un incendio en una superficie de 700 metros cuadrados”, ha escrito el jefe de la Administración Militar de la región de Odesa, Oleg Kiper, en su cuenta de Telegram.
Daños en graneros
El fuego ha sido sofocado, explicó Kiper, que habló de “daños en graneros” situados en el lugar del ataque, que no ha sido especificado. Según el jefe de la Administración Militar de la región de Odesa, las defensas antiaéreas ucranianas derribaron durante el ataque 9 drones lanzados por Rusia.
La agencia pública de noticias de Ucrania, Ukrinform, ha publicado imágenes de un granero destruido.
Según varios canales de Telegram ucranianos, el ataque se ha producido en el puerto del Danubio de Ismail, en el extremo suroccidental de Ucrania y muy cerca de la frontera con un país miembro de la OTAN como lo es Rumanía.
En julio terminó el acuerdo del grano
Desde que a mediados de julio diera por terminado el llamado acuerdo del grano, por el que durante un año se comprometió a permitir la exportación de productos agrícolas desde tres puertos ucranianos del Mar Negro, Rusia ha bombardeado repetidamente infraestructuras portuarias y agrícolas ucranianas.
Desde el comienzo de la invasión rusa a gran escala Ucrania ha incrementado sus exportaciones agrícolas por el Danubio ante el bloqueo militar ruso del Mar Negro.