París/Roma (EFE).- El primer avión francés con evacuados de Níger llegó esta madrugada al aeropuerto parisino de Roissy-Charles de Gaulle con 262 personas a bordo, entre ellas 12 bebés.
El avión, un Airbus A330, es el primero en llegar de los tres que Francia envió ayer martes a Níger en el inicio de la evacuación de los ciudadanos franceses y europeos que desean salir del país africano tras el golpe de Estado militar de la pasada semana.
Según fuentes oficiales, la mayoría de los repatriados son franceses, aunque también han viajado portugueses, belgas, libaneses y nigerinos.
Por su parte, portavoces del Estado Mayor miliar han asegurado que la operación de evacuación continuará mientras haya personas que deseen salir del país, sean ciudadanos franceses, europeos o de otras nacionalidades.
En cambio, “no está prevista” la salida de los aproximadamente 1.500 soldados franceses que actualmente están destacados en Níger para apoyar a ese país en la lucha contra el terrorismo yihadista, pero no están colaborando en el operativo de repatriación.
Italia repatría a 67 personas
También ha llegado a su destino el vuelo especial de las Fuerzas Aéreas fletado por el Gobierno italiano
A las 5,10 hora local, aterrizaba en Roma un avión con 67 civiles de diversas nacionalidades que han querido salir de Níger.
“Estamos satisfechos, todo salió bien”, dijo el vicepresidente del Gobierno y ministro de Exteriores, Antonio Tajani, que acudió a recibir a sus compatriotas al aeropuerto romano de Ciampino.
En el vuelo, junto a 36 italianos, viajaban 21 estadounidenses, 4 búlgaros, 2 austriacos, un británico, un nigeriano, un húngaro y un senegalés, además de algunos militares en proceso de rotación de la misión italiana en el país africano.
Riesgo de una nueva revuelta popular
La delicada situación que se vive en Níger tras el golpe de Estado ha provocado el inicio de la evacuación de los extranjeros en ese país.
El asalto a la embajada francesa el pasado domingo durante una manifestación convocada en apoyo a los golpistas en Niamey ha puesto en alerta al resto de representaciones occidentales, mientras que medios italianos, que citan fuentes de la inteligencia italiana, señalan que el riesgo de una nueva revuelta popular es muy fuerte.
No obstante, el ministro de Defensa, Guido Crosetto, ha asegurado que “actualmente, no hay riesgos particulares para la seguridad de los italianos, civiles y militares. Defensa y Exteriores trabajan en sinergia para garantizar la seguridad de nuestros compatriotas y de los militares comprometidos en la misión europea Eumpm y en la misión bilateral de apoyo en Níger, Misin”.