La Policía Nacional de Colombia, en colaboración con la Fiscalía General de la Nación, ha logrado desmantelar una banda delincuencial conocida como ‘Los de Blanca’ dedicada al tráfico de estupefacientes en el barrio Nuevo Portal y Portal del Divino Niño de la localidad de Usme en Bogotá. Durante nueve meses, las autoridades llevaron a cabo investigaciones y operativos que culminaron con la detención de cuatro mujeres y tres hombres, así como la incautación de un arma de fuego tipo revolver, mil dosis de cocaína y elementos para la fabricación y venta de estupefacientes.
Esta organización delictiva utilizaba a menores de edad para transportar y vender drogas en la zona, e incluso la líder de la banda, conocida como ‘Blanca’, involucraba a su propia hija de 13 años en el negocio, utilizando un sistema de video para supervisar las transacciones y alertar sobre la presencia policial. Además, la líder también amenazaba a los vecinos con armas de fuego para evitar denuncias ante las autoridades.
Durante los allanamientos, las autoridades encontraron un revolver con seis cartuchos, mil dosis de base de cocaína valuadas en tres millones de pesos, y otros elementos relacionados con el tráfico de drogas. Los detenidos tenían antecedentes por delitos como hurto agravado y tráfico, fabricación o porte de estupefacientes, y se estima que la banda generaba una renta criminal de 75 millones de pesos mensuales.
Seis de los detenidos enfrentan medidas de aseguramiento privativas de la libertad por delitos relacionados con tráfico de estupefacientes, concierto para delinquir y uso de menores de edad en actividades delictivas. El éxito de estas operaciones demuestra el compromiso de las autoridades colombianas en la lucha contra el narcotráfico y la protección de los menores de edad de la influencia de bandas criminales.
Estas detenciones representan un golpe significativo contra el tráfico de estupefacientes en la capital colombiana, y las autoridades continuarán trabajando para desmantelar las organizaciones criminales que buscan lucrarse a través de la venta de drogas. El trabajo coordinado entre la Policía Nacional y la Fiscalía General de la Nación es crucial para garantizar la seguridad y tranquilidad de los ciudadanos, especialmente en áreas afectadas por el crimen organizado.